Norma Angélica Cuevas Velasco realiza en este trabajo una propuesta seria, profunda y bien documentada, que asume riesgos críticos y los resuelve a través de un tipo de reflexión flexible y abierta, sin perder en ningún momento el rigor intelectual y académico.
Si bien la importancia de la obra de Maurice Blanchot es reconocida en el campo intelectual, prácticamente no existen trabajos dedicados a ella en el ámbito de habla hispana, y mucho menos dentro del terreno de la crítica literaria. De ahí, uno de los puntos de mayor importancia de este libro: el retomar las propuestas blanchotianas acerca de la teoría y el ejercicio literarios, y darles una nueva lectura empapada de aproximaciones actuales a la literatura.

A partir de esta "recuperación" de Blanchot, la autora toma el riesgo de construir un concepto teórico que dé cuenta de lo que ella misma llama la teoría en la literatura, distinguiéndola de la teoría de la literatura: el espacio poético. De este modo, propone una herramienta que permite mirar de una manera profunda y rigurosa un conjunto de obras escritas en nuestra lengua en las que la reflexión sobre el propio ejercicio escriturario constituye un núcleo central. El tejido reflexivo y conceptual que arma a partir de la noción de espacio poético es, sin duda, el aporte más importante de esta tesis a los estudios literarios en nuestro país.

La elección de El hipogeo secreto de Salvador Elizondo como objeto de análisis le posibilita a la autora profundizar y reforzar las características del espacio poético en tanto herramienta crítica, a la vez que le da una nueva lectura a una obra y un autor que por su "dificultad" y "extrañeza" han sido trabajados, en términos generales, con menor profundidad de la que demandan.